Crean circuitos eléctricos que se disuelven en el agua y son hechos con plantas
Soluboard está fabricada con materiales biodegradable lo que reduce el uso de elementos contaminantes para el ambiente.
En Alemania crearon placas de circuitos con material reciclado que se pueden disolverse en el agua para evitar la generación de más desechos, además, se pueden usar en productos electrónicos de cualquier tipo de industria.
El nuevo componente electrónico llamado “soluboard”, integra algunos materiales como plantas dentro de la mezcla para su fabricación, de modo que puede ayudar a la reducción de la basura electrónica que pudiesen generar las empresas para el año 2030.
Según Infineon, los materiales permiten que esta pueda reciclarse al ser biodegradable y no libere ningún componente tóxico tal y como lo hacen las versiones de fibra de vidrio que son usadas comúnmente en la producción de placas para las grandes empresas de tecnología.
Debido a que el material se presenta como fibras, el aspecto de este nuevo material es muy parecido al de un tejido de color amarillo que se descompone cuando es ubicado sobre agua caliente, aunque este proceso es lento y puede llegar a tomar varios minutos (al menos 6) hasta que no quede nada de la placa de circuitos.
El uso que se le puede dar a este componente es similar a cualquier otro. Una investigación desarrollada en la Facultad de Ingeniería de la Universidad de Washington en conjunto con Microsoft, logró producir un mouse que funcionaba con una placa “soluboard” como parte de su sistema.
Según Vikram Iyer, profesor asistente de la investigación en la Universidad de Washington, luego de que el componente se disuelve en agua caliente, deja chips y circuitos que se pueden filtrar con el uso de instrumentos adecuados.
De igual forma, el CEO y cofundador de Jiva Materials, que fabrica el material reciclable, Jonathan Swanston, dijo que “adoptar un método de reciclaje con base en agua puede llevar a mejorar el proceso de recuperación de materiales y metales valiosos”.
Se estima que aproximadamente se puede reducir la huella de carbono en un 60% con este método de fabricación, además de ahorrar aproximadamente 10.5 kilos de carbón y 620 gramos de plástico por metro cuadrado de material reciclable.
“Por primera vez, se está utilizando un material reciclable y biodegradable en el diseño de productos electrónicos para aplicaciones industriales y de consumo, un hito hacia un futuro más verde”, indicó Andreas Kopp, jefe de Product Management en la división de energía sostenible de Infineon.
La compañía ya se hizo cargo de la fabricación de tres prototipos diferentes de la placa de circuitos bio degradable, aunque solo está usando este material para realizar pruebas de rendimiento del proceso de disolución y en componentes electrónicos menores, aunque se está considerando la posibilidad de usar este material en todos los productos durante los próximos años.
Según el rendimiento que presenten estos componentes a las pruebas de rendimiento para saber cuánta capacidad pueden tolerar antes de empezar a presentar mal funcionamiento, es posible que se desarrolle algún tipo de orientación sobre la reutilización y el reciclaje de los semiconductores una vez que son retirados de los soluboards, de modo que se evite el desperdicio de componentes electrónicos y recuperar algunas piezas que pueden ser útiles en el futuro.