Principado de Seborga:
En busca de la independencia

Entrevista / Informe

Un pequeño territorio de 280 habitantes y cercano a la frontera con Francia busca desde hace años su independencia de Italia. En base a documentos del año 1729 las autoridades seborguinas luchan por lograr su independencia y convertirse en una Nación soberana. Código B contactó al Consejero de la Corona para Asuntos Exteriores con el objetivo de conocer más sobre la ¨Micronación¨ que cuenta con moneda propia (Luiguino) y hasta selección de fútbol.

Muchas veces Seborga ha sido catalogada como una “micronación”, pero la realidad es que tiene una actividad social y cultural muy importante. ¿Creen los habitantes y las autoridades que se debe reconsiderar el concepto de “micronación”?
De hecho, no nos consideramos una “micronación” en absoluto: el Principado de Seborga no es un juego, como muchos otros “juegos”, sino que basa sus aspiraciones de independencia en razones históricas bien fundadas y serias. El Principado de Seborga es pues una realidad seria en la que todos creemos firmemente en Seborga, y aspiramos realmente a reactivar nuestra independencia y volver a ser un verdadero estado reconocido.

Teniendo en cuenta la pregunta anterior, ¿tuvo intercambios diplomáticos con otros estados soberanos o con regiones vecinas?
Seguro. La promoción de nuestro Principado en otros países es estratégicamente muy importante para nosotros. Un Cuerpo de Diputados Extranjeros nos ayuda en este objetivo. Nuestros Representantes Extranjeros, a modo de una especie de Cónsules y Embajadores, son colaboradores del Principado que tienen la tarea de promover Seborga a nivel político-institucional, histórico, turístico y comercial en sus respectivos países, manteniendo relaciones con las autoridades locales, instituciones, medios y ciudadanos. De esta manera, buscamos desarrollar relaciones diplomáticas con estados reconocidos, aunque típicamente a un nivel informal. La impresión que tenemos es que las autoridades extranjeras con las que entramos en contacto, incluso si no nos reconocen oficialmente, nos tratan con respeto y consideración. Por ejemplo, nuestro ex príncipe Marcelo fue recibido por un miembro de la familia real jordana y una delegación de Seburg fue recibida por algunos senadores del Senado de los Estados Unidos; varias veces nuestros representantes han sido invitados formalmente a embajadas y consulados de otros estados reconocidos; y tenemos relaciones informales pero amistosas con nuestros “vecinos” en el Principado de Mónaco. A la fecha, uno de nuestros Representantes en el Exterior -el de Costa de Marfil- está oficialmente acreditado como Cónsul del Principado de Seborga por el Ministerio marfileño de Asuntos Exteriores.

¿Cómo es la relación con Italia?
Como también establece nuestra constitución, los Estatutos Generales, las relaciones entre el Principado de Seborga y otros países se basan siempre en el respeto mutuo. Por lo tanto, existe una relación cordial con Italia, aunque cada uno se mantiene firme en sus posiciones. No tenemos relaciones directas con el gobierno italiano: tendemos a relacionarnos más con las realidades italianas locales más cercanas a Seborga. Por ejemplo, incluso con el Municipio de Seborga, que es el organismo italiano con el que estamos más en contacto, siempre ha habido un clima de colaboración hasta ahora: aunque con diferentes modalidades y propósitos, el Principado y el Municipio tienen en cualquier caso el activo de Seborga como su objetivo, que actualmente está representado principalmente por el turismo y el apoyo a la economía local. Los acontecimientos del Principado representan el principal motivo de la afluencia turística a Seborga, y esto acaba prevaleciendo sobre el hecho de que el Principado realmente aspira a la independencia. Incluso los municipios limítrofes de Seborga acaban beneficiándose de la historia de nuestro Principado, ya que muchas veces los turistas que visitan nuestro país pasan luego también por los demás países vecinos.

Seborga nunca deja de sorprender con su hermoso paisaje y sus calles. ¿Cómo es el día a día en el Principado? ¿Cuáles fueron las repercusiones de la pandemia?
Seborga es una ciudad muy pequeña, de solo 280 habitantes, ubicada a 500 metros sobre el nivel del mar en el interior del extremo occidental de Liguria, cerca de la frontera entre Italia y Francia. Es un pueblo hospitalario, cuidado, rodeado de naturaleza: entre villas, palmeras, jardines, bancales con mimosas, retamas y olivos, ofrece al visitante un panorama maravilloso y en días claros desde Seborga es posible ver cuatro estados al mismo tiempo – Seborga sí mismo , Italia, Francia y el Principado de Mónaco. Detrás se elevan los picos nevados de los Alpes Marítimos. Su proximidad a los extensos pinares de Monte Nero y Monte Caggio hace que se respire aire saludable. Es un oasis de paz, calma y tranquilidad. Hoy Seborga vive principalmente de pequeños negocios, agricultura y floricultura; nuestro país es famoso en el mundo por el cultivo de la mimosa, de la cual es uno de los mayores productores del mundo. Gracias a que Seborga es un Principado y gracias a nuestra excelente política de comunicación, la afluencia turística es discreta.
Afortunadamente, el impacto del coronavirus en Seborga fue casi inexistente a nivel médico, habiendo tenido un número de pacientes que se pueden contar con los dedos de una mano (en cierto sentido, el Principado de Seborga podría definirse como uno de los poquísimos países del mundo “libres de COVID”). A nivel económico, comercial y turístico, en cambio, obviamente sufrimos las consecuencias del confinamiento en 2020 y en los primeros meses de 2021, como casi todas las realidades turísticas: nadie podía salir de casa salvo por motivos de salud, necesidad o trabajo. En los últimos meses la situación está volviendo paulatinamente, si no a la normalidad, a una situación más aceptable. Esperamos ver pronto la luz al final del túnel.

¿Qué actividades culturales, sociales y deportivas se realizan periódicamente? Su presencia en las redes sociales es muy activa y se puede ver como estas actividades integran a toda la población.
El año pasado organizamos un bonito concurso de arte de mimosa. Nuestro objetivo era traer un poco de “belleza” y un poco de despreocupación en un momento difícil: todos tenían la oportunidad de expresarse creativamente y, al mismo tiempo, promocionamos nuestra tierra y nuestra mimosa y mostramos el valor del arte en un momento en que este sector se ha visto severamente afectado por las restricciones de la pandemia. Cualquiera podía crear una obra de arte en mimosa, con cualquier técnica y con cualquier tamaño, y publicarla en las redes sociales con ciertos hashtags, y los ganadores recibían un premio. Luego, en agosto, organizamos una exposición de fotos antiguas de Seborga en las calles de nuestro pueblo: fue una iniciativa muy apreciada porque todos pudieron comparar las vistas de nuestro pueblo tal como es ahora y como era antes. En cuanto al ámbito social, hace unas semanas la Princesa Nina y una delegación de Consejeros de la Corona participaron en un acto benéfico a favor de la infancia, con motivo del Día Mundial del Niño. Y desde el punto de vista deportivo, en septiembre nuestra selección nacional de fútbol participó en un hermoso torneo internacional organizado por la Confederación de Asociaciones Independientes de Fútbol. Por último, el 20 de agosto de cada año celebramos nuestro día institucional más importante, que es la Fiesta de San Bernardo, la Fiesta Nacional del Principado de Seborga.

Última pregunta, ¿qué proyectos de futuro tienen las autoridades y los habitantes del PRincipado de Seborga?
Hace unos días aprobamos nuestra reforma constitucional de los Estatutos Generales; los nuevos Estatutos han sido completamente reescritos desde cero y ahora son más estructurados, completos y precisos. El 8 de mayo haremos un referéndum popular y si gana el Sí entrarán en vigor los nuevos Estatutos. Luego en los próximos meses emitiremos nuevas Cédulas de Identidad porque actualizaremos nuestro Registro Personal. En verano nos gustaría presentar, después de 8 años, una nueva emisión de sellos del Principado y también estamos trabajando en una sorpresa para nuestros aficionados a la numismática. Nos gustaría organizar un partido de fútbol con Mónaco y Vaticano, con fines benéficos. Y por último nos gustaría recuperar los antiguos documentos históricos que prueban la independencia de Seborga.

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