Los 12 descubrimientos más fascinantes
del mundo animal del 2021

Interés General

Desde hormigas que pueden volver a hacer crecer sus cerebros, hasta el reptil más diminuto del mundo, te presentamos la selección de nuestros editores para los descubrimientos de vida silvestre más interesantes del año.

A medida que nos acercamos al tercer año de la pandemia de COVID-19, en medio de un cambio climático cada vez más destructivo, la cobertura de las noticias sobre ciencia a veces puede parecer una lectura pesada y poco importante.

Pero la Tierra sigue siendo un lugar increíble, repleto de promesas y misterios por descubrir y contar. Las investigaciones sobre las maravillas del mundo natural siguen mostrándonos lo sorprendente que es la vida en nuestro planeta.

Estos son los 12 descubrimientos de animales que más nos han llamado la atención este año.

Nacimientos vírgenes” en un ave poco común
Los cóndores de California -magníficos carroñeros con una envergadura de casi nueve metros- estuvieron a punto de extinguirse a mediados del siglo XX, debido al envenenamiento, la caza furtiva y la destrucción del hábitat. En un ambicioso intento por salvarlos, en 1987 se capturaron los 22 cóndores en estado salvaje y se criaron en cautividad, antes de ser liberados en partes de California, Utah, Arizona y Baja California (Estados Unidos). La población total es ahora de más de 500 ejemplares.

Los investigadores han realizado un cuidadoso seguimiento de los hábitos reproductivos y la genética de las aves, y en octubre descubrieron que dos hembras habían dado a luz a crías sin reproducirse. Se trata de la primera prueba de parto virgen, también conocido como partenogénesis, en esta especie (y probablemente en cualquier ave no domesticada). Los científicos creen que esta forma de reproducción es mucho más común en el mundo animal de lo que se pensaba, en parte porque es difícil de detectar y rara vez se sigue.

Aunque la partenogénesis podría servir como método de supervivencia para especies raras cuando las parejas son escasas, también podría tener inconvenientes, como la reducción de la diversidad genética.

¿Por qué ha ocurrido esto? “No lo sabemos”, dice Oliver Ryder, director de genética de la conservación en la Alianza para la Vida Silvestre del Zoo de San Diego (Estados Unidos). “¿Sucederá de nuevo? Yo creo que sí”.

COVID-19 detectada en ciervos salvajes y otros animales
El virus que causa la COVID-19 no sólo afecta a los humanos: también puede infectar a una gran variedad de especies animales.

Hasta ahora, los investigadores han encontrado pruebas de infección en animales cautivos o domesticados, como tigres, leones, gorilas, visones, leopardos de las nieves, perros domésticos y gatos domésticos. En general, se cree que el virus causa síntomas leves en otros animales.

Pero el virus también infecta a los ciervos salvajes de cola blanca en Norteamérica. Científicos de Iowa han encontrado infecciones activas en cerca del 80 por ciento de los ciervos, según una investigación publicada en noviembre en bioRxiv, un sitio que publica hallazgos científicos preliminares.

El análisis sugiere que los ciervos se han infectado varias veces a través de las personas y se lo están transmitiendo unos a otros, aunque nadie sabe cómo los ciervos pueden haber cogido el virus. Esta investigación es similar a un estudio publicado a principios de año que mostraba que el 40 por ciento de 152 ciervos analizados en tres estados -Michigan, Illinois y Nueva York- tenían anticuerpos contra el SARS-CoV-2.
La presencia del virus en un animal común es preocupante, ya que los ciervos podrían transmitirlo a los humanos, dicen los investigadores.

El hallazgo del reptil más diminuto del planeta
En febrero, los investigadores anunciaron una nueva especie de camaleón descubierta en una selva tropical del norte de Madagascar, llamada Brookesia nana, o B. nana para abreviar. Este llamado nano camaleón tiene el tamaño de una semilla de girasol y podría ser el reptil más pequeño de la Tierra.

El hallazgo de un reptil tan diminuto plantea interesantes cuestiones sobre los límites del tamaño corporal de los vertebrados. También pone de relieve la asombrosa -y muy amenazada- biodiversidad de Madagascar, dicen los científicos. Sus descubridores sospechan que el camaleón pronto será incluido en la lista de especies en peligro crítico.

Clonación de un hurón de patas negras
Para salvar otra especie en peligro de extinción, los científicos han clonado con éxito un hurón de patas negras, utilizando células conservadas de un ejemplar salvaje muerto hace tiempo. Es la primera vez que se clona en Estados Unidos una especie autóctona en peligro de extinción.

El logro, anunciado en febrero, es un gran avance, ya que sólo quedan unos 500 hurones de patas negras, todos ellos estrechamente emparentados y descendientes de una única colonia encontrada en 1981 en Wyoming, después de que la especie se creyera extinguida.

Pero las células de una hembra llamada Willa, que murió a mediados de los 80 sin reproducirse, se conservaron en hielo en el Frozen Zoo, un programa de la San Diego Zoo Wildlife Alliance. Estas células se han clonado y convertido en un hurón viable llamado Elizabeth Anne.

Los investigadores esperan que su descendencia pueda ser reintroducida en la naturaleza en los próximos años, inyectando una dosis muy necesaria de diversidad genética en la población endogámica.

Hallado un punto caliente de diversidad de abejas en el mundo
El valle de San Bernardino, a caballo entre Arizona y México, es uno de los humedales interiores más importantes del suroeste de Estados Unidos. A lo largo de los siglos, el agua ha viajado hacia el sur desde las montañas y se ha abierto paso a través de pozos artesanos, dando lugar a una gran cantidad de plantas y flores durante todo el año. Esta diversidad de plantas también da sustento a una enorme variedad de insectos, incluidas las abejas.

En abril, un estudio publicado en el Journal of Hymenoptera Research, descubrió que 497 especies de abejas viven en poco más de seis millas cuadradas del valle, 10 veces más pequeño que Washington, D.C. Esta es, con mucho, la mayor concentración de diversidad de abejas en la Tierra.

El descubrimiento hace crucial la necesidad de proteger el valle, que ha sufrido la construcción del muro fronterizo, una valla de acero de nueve metros que lo atraviesa. Los constructores utilizaron grandes cantidades de agua del acuífero para fabricar el cemento de la base del muro, lo que provocó que los manantiales del valle se secaran.

Algunos elefantes están evolucionando para perder sus colmillos
La guerra civil de Mozambique, que duró de 1977 a 1992, fue brutal para los elefantes africanos: más del 90% de los animales fueron asesinados por el marfil en el Parque Nacional de Gorongosa del país. Pero la carnicería tuvo un resultado inesperado: algunos elefantes están evolucionando sin colmillos, lo que les da menos posibilidades de ser asesinados por los cazadores furtivos.

Como ya informó National Geographic, alrededor de un tercio de las hembras más jóvenes de Gorongosa, nacidas tras el fin de la guerra en 1992, nunca desarrollaron colmillos.

Una investigación publicada en octubre en Science muestra que esos elefantes tienen copias mutadas de dos genes que normalmente promueven el desarrollo de los colmillos.

Normalmente, la falta de colmillos sólo se da en un 2 ó 4 por ciento de las hembras de elefante africano.

Los jaguares se adentran en EE.UU. y reclaman su antiguo territorio
Arizona y Nuevo México son territorios tradicionales del jaguar: a principios del siglo XX era posible encontrar ejemplares de este gran felino en ambos estados y hasta el norte del Gran Cañón. Pero en los últimos 15 años, se ha informado de un total de siete jaguares machos en Arizona.

Como informó National Geographic en marzo, los científicos saben ahora que un jaguar macho adolescente habita en tierras protegidas a unos pocos kilómetros al sur de la frontera donde se encuentran México, Arizona y Nuevo México, lo que indica que la especie puede estar extendiéndose hacia el norte desde una población reproductora en Sonora, México.

Los científicos predicen que es posible que el felino acabe recuperando partes de su antigua área de distribución en EE.UU., si los propios animales y sus corredores de vida silvestre están protegidos, y si el muro fronterizo no se expande aún más.

Los caballos y burros salvajes cavan pozos en el desierto
Aunque algunos consideran que los caballos y burros salvajes son una amenaza introducida, pueden influir en su entorno de forma que ayudan a otros animales.

En abril, en la revista Science, los científicos informaron de que estos animales pueden utilizar sus pezuñas para cavar a más de dos metros de profundidad para llegar a las aguas subterráneas, creando a su vez oasis que sirven de ayuda a otros animales salvajes. El equipo encontró estos pozos en el desierto de Sonora, en el oeste de Arizona, y en el desierto de Mojave, y registró un total de 57 especies que visitaron las fuentes de agua. Entre ellas, tejones americanos, osos negros y toda una serie de aves, incluidas algunas especies en declive, como los búhos reales.

Este comportamiento se ajusta a la definición de “ingeniería del ecosistema”, un fenómeno por el que la fauna altera su entorno, afirma el autor del estudio, Erick Lundgren, investigador postdoctoral de la Universidad de Aarhus (Dinamarca).

Estas babosas marinas se cortan la cabeza
Normalmente, cuando un animal pierde la cabeza, también pierde la vida. Pero no es el caso de algunas babosas de mar. Como se describe en un estudio publicado en marzo en Current Biology, dos especies de estos animales marinos pueden arrancarse sus propias cabezas. Cada cabeza desmembrada puede regenerar un cuerpo completamente nuevo.

Estas criaturas también son inusuales en el sentido de que pueden robar cloroplastos de las algas y potencialmente cosechar energía del sol dentro de sus propios cuerpos.

Los investigadores están interesados en estos ejemplos extremos de regeneración corporal, que podrían tener implicaciones para la medicina humana.

Las cacatúas aprenden de sus congéneres
¿Los animales tienen cultura? Si la cultura consiste en un conjunto de comportamientos compartidos que pueden transmitirse entre individuos, la respuesta es sí. Pero los estudios sobre el aprendizaje y la cultura de los animales suelen centrarse en un grupo específico de mamíferos, como los cetáceos y los grandes simios. Los científicos querían saber si los loros también tienen cultura.

En los suburbios de Sidney (Australia), algunas cacatúas de cresta de azufre -o cacatúa galerita, un loro gregario y colorido- han descubierto cómo abrir las tapas de los cubos de basura, lo que les permite acceder a una nueva fuente de alimento, según un estudio publicado en julio en la revista Science. Otras cacatúas copiaron rápidamente este comportamiento.

Este descubrimiento significa que los loros “se han unido al club de los animales que muestran cultura”, afirma la directora del estudio, Barbara Klump, ecóloga del comportamiento del Instituto Max Planck de Comportamiento Animal de Alemania.

La migración de las ballenas bate récords
¿Hasta dónde puede nadar una ballena?
Una ballena gris batió el récord mundial de un vertebrado marino al recorrer más de 26.000 kilómetros, más de la mitad del mundo, según un estudio publicado en junio en la revista Biology Letters. El cetáceo macho, avistado frente a Namibia en 2013, es también la primera ballena gris observada en el hemisferio sur.

Cuando el coautor del estudio, Simon Elwen, zoólogo de la Universidad de Stellenbosch (Sudáfrica), se enteró del avistamiento de 2013, se mostró escéptico.

“Es como si alguien dijera que ha visto un oso polar en París: técnicamente podría llegar hasta allí, pero no parece muy realista”. Pero la investigación demostró que los genes de la ballena coincidían con los de la población conocida en el Pacífico Norte.

Las hormigas pueden encoger y volver a crecer sus cerebros
Las hormigas saltarinas de la India, una especie con mandíbulas en forma de fórceps y grandes ojos negros que habita en los bosques de la costa occidental de la India, tienen una extraña forma de elegir a las reinas. Para ello, las obreras organizan competiciones en las que la ganadora se convierte en la monarca, capaz de producir huevos. Los ovarios de la hembra ganadora se expanden y su cerebro se encoge hasta un 25 por ciento.

Pero estas reinas también pueden ser bajadas de su pedestal y convertirse de nuevo en obreras, lo que hace que sus órganos reproductores se reduzcan y el cerebro vuelva a expandirse, una hazaña extraordinaria que no se conocía previamente en los insectos, según un estudio publicado en abril en Proceedings of the Royal Society B: Biological Sciences.

“En el mundo animal”, explica el director del estudio, Clint Penick, de la Universidad Estatal de Kennnisaw (Georgia, Estados Unidos), “este nivel de plasticidad -y especialmente de plasticidad reversible- es bastante único”.

Por Douglas Main / NG
Este artículo se publicó originalmente en inglés en nationalgeographic.com.

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